Si la semana pasada os contábamos que por San Miguel había regresado después de casi dos años uno de los actos más tradicionales del Norte, este fin de semana vuelve otro de esos actos que se ha celebrado durante siglos: La Feria de Marcilla.
Y es que, estamos en esos momentos en los que los festejos populares vuelven y lo hacen con más fuerza que nunca.
La Feria de Marcilla se remonta a tiempos inmemoriales cuando, se concedió el derecho de feria a la villa por Decreto Real. Desde entonces y hasta ahora la feria se ha ido celebrando años tras año evolucionando y adaptándose a la sociedad de cada momento.
Si hablas con los marcilleses te dirán que La feria tiene algo especial, no son unas fiestas más, es algo diferente. Algo casi mágico.
En torno al 12 de octubre, Marcilla celebra estas fiestas que se dividen tradicionalmente en tres actos diferenciados: el día del caldero, el día de la artesanía y la estrella de la programación, el día del Caballo.
El sábado, los fosos del castillo son los protagonistas cuando se llenan, desde el punto de la mañana, de decenas de cuadrillas que se disponen a cocinar el caldero o el rancho en un acto en el que las risas y las buenas conversaciones están aseguradas hasta, por lo menos, la entrega del premio al mejor caldero, cuando las cuadrillas recogen los aperos para comer en sus peñas y coger fuerzas para el resto del día.
Si el sábado es el día de los calderos, el domingo una preciosa feria de artesanía inunda las calles del pueblo: collares y pendientes, trabajos en madera, soplado de vidrio, talleres y venta de miles de artículos artesanales.
Pero como decimos, el día 12 es el día. Marcilla abre sus puertas de par en par para recibir a miles de personas que se acercan hasta el lugar para disfrutar de magníficas exhibiciones de monta e hípica, traslado de ganado en trashumancias que vienen desde el campo hasta el corazón de la villa, paseos en carros y carruajes, exhibiciones de magníficos ejemplares… Es una mañana preciosa.
Además, durante todo el fin de semana se suceden actos para todos los públicos: conciertos, gigantes, encierros, música en la calle…
Si este puente no sabes que hacer, en Marcilla tienes una vita con unas fiestas ancestrales de esas que destilan tradición y ese “algo especial” que es difícil de explicar.
Ferias de Marcilla: del sábado 9 al martes 12 de octubre.
